MORTERA VERDE DEFINE A LIENCRES COMO ANTIPARQUE NATURAL.

Ausencia de agentes que controlen el caos automovilístico, accesos colapsados, vehículos aparcados con total impunidad en cualquier lugar del entorno natural frente a los carteles que lo prohíben, saturación de espacios, acampada de autocaravanas sin control: en resumen, Liencres el mejor ejemplo de lo que no es un parque natural.

Los problemas del abuso y no del uso del Parque Natural de Liencres se vienen repitiendo verano tras verano sin que las pocas soluciones que se han adoptado para corregirlas hayan sido en alguna medida eficaces.

Quizá debamos recordar que un Parque Natural no es exactamente una romería. Las restricciones en el control del acceso de los vehículos a estos lugares se establecen con gran rigor en todos los parques del mundo y por supuesto en nuestro país. Igualmente sucede con la valoración de la carga de vehículos que un espacio natural de estas características puede soportar. Debe establecerse cuántos vehículos entran y a partir de ahí situar unos agentes a la entrada que informen de la saturación del parque y de lugares alternativos para dejar los vehículos.

Nada de esto sucede. Los vehículos acampan a sus anchas donde pueden y. por supuesto, nadie lleva la contabilidad de vehículos estacionados para evitar que sigan entrando cuando el parking está completo.
Si bien hay establecida una cuadrilla de TRAGSA para regular el aparcamiento, ésta no tiene autoridad para imponer multas, de modo que los usuarios pueden desoír impunemente sus peticiones. Así que los sueldos que pagamos por estos trabajadores se suman al desmadre general. Quienes deberían estar allí, continuamente, son la guardia civil o mejor aún, la policía local, para asegurar el cumplimiento de la ley.

Una ley que tampoco se aplica para las autocaravanas, que aparcan tranquilamente junto al cartel que lo prohíbe. De forma que ya hay familias de Santander que estacionan ahí su vehículo durante todo el verano para utilizarlo los fines de semana. Un apartamento gratis en pleno espacio natural.
Y no es que estemos en contra de las autocaravanas. Pero una vez más debemos ser coherentes: si se prohíben no puede haber ninguna, y si se permiten, debe establecerse el área que les compete y dotarse de los servicios adecuados.

El aparcamiento en pistas y lugares expresados prohibidos por Costas tampoco se hace cumplir, como puede apreciarse en la imagen adjunta.

Y no es por falta de soluciones. Mortera Verde viene enviando informes desde 2.009 al Patronato de Gestión del Parque Natural en los que se pide, además de lo arriba suscrito, la creación de un gran aparcamiento en el exterior del parque y la habilitación de un pequeño tren gratuito para acercar a los bañistas a la playa. Esto permitiría además la supresión de la mayor parte del parking próximo al mar para la recuperación del espacio dunar.

Quizás con estas medidas y algunas más podamos contar con un verdadero parque natural.